domingo, 12 de junio de 2011

Cambios

No se si alguna vez habéis perdido un espacio,supongo que todo depende de la edad,un servidor  ha visto desaparecer alguno personal y alguno más publico.  Esa perdida a veces uno la descubre casi por casualidad, y crea una pequeña conmoción interior.
Recuerdo especialmente un cine de de verano que iba con mis padres cuando era pequeño, y que yo pensé durante mucho tiempo que existía, solo que no sabía el camino adecuado.Descubrí que en su lugar había una estación de tren y que todo el entorno se había transformado en un nuevo espacio, a partir de ese momento fui mas sensible a estas transformaciones que vivimos y de los restos que han pervivido a través de los siglos, algunos de ellos por su valor artístico e histórico y otros por la casualidad, estos últimos en los rincones mas inesperados.
Recuedo que siendo niño también me gustaba ir a el canódromo, un espacio dentro de la ciudad donde hacían carreras de perros,no se tenia que pagar entrada y nos íbamos con los amigos a pasar la tarde.
También una casa de billares con un montón de mesas, espacio al que iba ya mas adulto a relajarme jugando una partidita solitaria.
Quizá me emocione todo esto por ser una prueba palpabe de mi paso temporal y breve por este camino que llamamos vida.
Sea como sea, me tomo muy en serio todos los espacios, por lo aparentemente intrascendentes que puedan parecer algunos , no hay que dejarse engañar, porque puede que algún día los añoremos.

1 comentario:

  1. Cuando me quedé calvo ¿perdí la peluquería o la peluquería me perdió a mí?

    Anduve paseando por tu blog. Muy bueno: un espacio que habla de espacios.
    No sé si te haré consultas sobre maderas pero sí que volveré a leerte.

    Un saludo.

    ResponderEliminar